Cada vez que inauguran una nueva infraestructura: tercer cinturón, cuarto, autovía de castellón nos anuncian que van a mejorar las comunicaciones en Zaragoza. Todas estas infraestructuras están bien pero llegan tarde, de manera que en apenas unos años se colapsan y necesitamos nuevas infraestructuras. A la vez, aunque no se colapsen, resulta que la gente se anima a invertir, se revalorizan terrenos, se promueven casas, polígonos y en pocos años se vuelve a colapsar. Al final, para el ciudadano normal, la cosa sigue igual de colapsada, da igual lo que se haga. Creo firmemente que el principal beneficiado de todas estas infraestructuras es el especulador y que debería ser él, el que pagara todas estas infraestructuras. El caso típico es el del tercer cinturón: los constructores supieron antes que nadie por dónde iba a ir el cinturón, compraron los terrenos. Cuando llegó el turno de expropiar, exigieron millonadas y se les dieron. A la vez, el precio de sus terrenos se multiplico varias veces por la revalorización ¿no era suficiente como indemnización la revalorización y recalificación?
A pesar de que soy un firme defensor de que hay que hacer cosas, invertir en infraestructuras para progresar, empiezo a creer que lo mejor es no hacer nada e intentar reorganizarse con lo que ya tenemos. Creo que se llama desarrollo sostenible.
